Cuando el alma necesita llorar

Cuando una persona se siente triste, llora. Pero cuando es feliz, también llora. Y llora, además, si se le mete algo en el ojo…

Entonces, ¿llorar es un gesto positivo o negativo?

Durante muchos años no estaba bien visto que las personas derramaran lágrimas, sobre todo los hombres, era un signo de debilidad.

En la actualidad sucede justo lo contrario: poder llorar sin complejos muestra fortaleza y la capacidad de enfrentarse a los problemas.

Siempre he pensado que si tenemos la facultad de reír y llorar ¿por qué privarnos de ello?

Llorar es bueno para el alma

Yo suelo reír con total desenfado, si he de reír una broma o un evento feliz lo disfruto al máximo, y si he de llorar, lloro con total libertad, no quiero guardarme en el corazón lágrimas que me hagan sentir frustrada o herida por mucho tiempo. Mejor las dejo correr y que las lleve el viento, suena poético, lo sé.

De todas maneras, estudios recientes afirman que llorar le hace bien al alma

Esto no es nada nuevo, ya que, seguro que tú lo has sentido por ti mismo, cuando agobiado por los problemas un día te dejas llevar por las lágrimas, cuando has perdido a alguien que era importante para ti, las lejanías, las cercanías que duelen, las frustraciones, las pequeñas victorias y las grandes derrotas, que hemos llorado, claro que sí…

Lloramos de felicidad y de alegría

Hay quien sigue pensando, erróneamente, que las lágrimas son una debilidad.

Llorar ayuda a expresar sentimientos de tristeza o pena, pero también a arrancar otros como la ira, el dolor o la rabia.

El llanto nos ayuda a liberarnos de sentimientos negativos y a descargar ese estrés que a veces nos paraliza. Entonces, ¿por qué no llorar cuando realmente lo necesitamos?

Llora para liberarte

Tampoco pienses que estoy sugiriendo que te aficiones al llanto.

La vida requiere también de entereza, pero cuando queremos llorar porque nos sentimos superados, hay que dejar que esas lágrimas nos liberen del sentimiento.

No hay que negarle a la felicidad unas lágrimas que siempre emanan fácilmente y que luego parecen extinguirse sin más…

Dicen que después de la tormenta viene la calma, llorar es saludable por cuanto te libera de la frustración y la ansiedad. Así lo dicen los expertos. 

Después de llorar seguro que te sentirás mejor

Emociones expresadas, emociones superadas .Aunque las cosas no cambien por una lágrima, siempre puedes y en eso estarás de acuerdo conmigo, retomar con más calma, el empeño de la vida…

Llora que es sano, y llora porque eso alivia el alma. 

5 beneficios saludables de las lágrimas

La simple acción de llorar aporta numerosos beneficios, por lo que la próxima vez que sintamos la necesidad de desahogarnos en lágrimas, no lo dudemos. Nos ayudará más de lo que imaginamos. Por ejemplo:

Fuente de hidratación

Existen tres tipos de lágrimas: las emocionales, las reflejas (cuya función es proteger el ojo cuando, por ejemplo, cortamos cebolla) y las basales.

Estas últimas son las lágrimas que segregamos de forma permanente para mantener el ojo hidratado.

No obstante, una dosis extra de hidratación nunca viene mal, y esta llega a través de las otras dos clases de lágrimas.

Limpian, lubrican y oxigenan la córnea, lo que en términos generales significa que cuidan nuestra visión.

Fuera estrés

La experiencia nos dice que cuando lloramos movidos por una emoción, habitualmente negativa, nos sentimos mejor, más relajados y menos preocupados. Y la ciencia lo confirma.

Un estudio realizado en Minnesota (Estados Unidos), liderado por el doctor William H. Frey II, reveló que las lágrimas que derramamos fruto de las emociones contienen altas dosis de adrenocorticotropina, una hormona relacionada con el estrés.

También liberan prolactina y leucina encefalina, un analgésico natural.

De ahí que cuando lloremos nos sintamos inmediatamente mucho más tranquilos: las lágrimas reducen el estrés y calman el dolor. Es cuestión de química.

De hecho, la composición de la lágrima varía en función de la emoción que la provoque, según comprobó en el microscopio la fotógrafa Rose-Lynn Fisher.

Adiós al mal genio

Otra ventaja de llorar es que con las lágrimas se libera manganeso.

Los altos niveles de manganeso en el cuerpo provocan fatiga, irritabilidad, depresión y ansiedad, por lo que reducir la cantidad de manganeso equivale a aplacar el mal genio.

Y el mal genio va ligado al estrés, a la tristeza, a los pensamientos pesimistas…

Llorar es el primer paso para superar el dolor

La química es en gran parte responsable de que llorar nos alivie cuando sentimos pena o dolor. Pero no es la única razón.

Cuando lloramos como reacción a una emoción negativa, transformamos esa negatividad en algo tangible, algo que podemos manejar, algo a lo que podemos hacer frente.

Y lidiar con cosas tangibles es siempre más fácil que con emociones que no terminamos de definir bien.

Es decir, llorar es el primer paso para superar el dolor.

Hablar con los ojos

Habitualmente lloramos en soledad, por temor a que otros nos vean o simplemente porque es cuando estamos solos cuando sentimos la necesidad de desahogarnos.

Pero lo cierto es que llorar en compañía es una forma efectiva de comunicarnos, de expresar nuestros sentimientos, y por tanto de que el grupo (de amigos, de familiares, de colegas de trabajo) funcione mejor.

Dicho de otro modo, las lágrimas nos ayudan a conectar con otros, crean un vínculo que mejora la comunicación.

Llorar, por tanto, es bueno. Mucho más si estás preocupado, dolido o estresado por alguna situación negativa.

En ese caso, intentar tragarse las lágrimas te debilitará, ya que mantener las emociones a raya es complicado: requiere mucho esfuerzo, esfuerzo que se traduce en ansiedad, irritabilidad, estrés… y que incluso puede derivar en enfermedades cardiovasculares.

Es como si cargaras con una gran piedra, piedra que sólo soltarás cuando des rienda suelta a tus lágrimas.

Eso sí, aunque llorar es un proceso saludable, en el caso de las personas que sufren trastornos del humor como por ejemplo una depresión, las lágrimas les harán sentirse peor. El resto, ¡dejadlas correr!

«El llanto es a veces el modo de expresar las cosas
que no pueden decirse con palabras.»
-Concepción Arenal-